¿Qué es la Etología y por qué es clave para la Tenencia Responsable en Chile?
La Etología es la base de la Tenencia Responsable. Entender la conducta de nuestros compañeros animales es el primer paso para prevenir el abandono y el maltrato. A pesar de los esfuerzos de profesionales y veterinarios etólogos clínicos por divulgar su trabajo, esta ciencia sigue siendo una gran desconocida para muchos.
Lo Básico de la Etología
La palabra etología tiene origen griego (ethos = costumbre + logos = estudio/ciencia). Es la rama de la biología que estudia el comportamiento animal, investigando tanto las conductas innatas como las aprendidas. Por ello, no es de extrañar que veamos a biólogos que hablan sobre la conducta animal.
Etología Clínica: Una Especialidad Vital
Los problemas de conducta en mascotas se asocian a un fallo en la comunicación, una falta en la cobertura de sus necesidades o dificultades de adaptación.
Aunando los conocimientos de la etología con los de la veterinaria es como nace la etología clínica o medicina del comportamiento, una nueva especialidad para poder dar respuestas y obtener resultados en el camino hacia el tratamiento de los problemas de conducta.
Los Pilares de la Etología Clínica
Los pilares de la etología clínica son prevenir, diagnosticar y tratar los problemas de conducta en los animales domésticos. Debemos tener presente que los animales son seres vivos, con sus necesidades físicas, psíquicas y emocionales. Y como tales, necesitan ser cubiertas para que se sientan plenos.
Problemas Frecuentes
Al principio, los cambios de conducta pueden ser sutiles, pero a la larga se cronifican. Algunas de las conductas más conocidas cuando el perro o gato sufre una alteración en su comportamiento son:
- Ansiedad por separación
- Miedos, fobias a lo desconocido o ruidos fuertes
- Agresividad con otros de la misma especie o con especies diferentes
- Ladrido o maullido en exceso
- Dificultad de manejo durante los paseos
El Diagnóstico es la Clave
Con un diagnóstico y valoración inicial por un veterinario etólogo y el tratamiento indicado (bien sea farmacológico y/o pautas de manejo), se pueden resolver o al menos mejorar considerablemente muchos de estos problemas.
Recuerda: Los problemas de agresividad, miedos o ansiedad (como verás en otros artículos) son solo la punta del iceberg de un desequilibrio que puede ser tratado por un profesional. No dejes que la indiferencia gane.
